¿Los profesionales deberíamos enseñar?

¿Los profesionales deberíamos enseñar?

diciembre 17, 2014 0 Por Cool Tattoo SL
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¿Quién dijo que en cualquier oficio se nace sabiendo? Conozco tatuadores internacionales y de reconocimiento mundial de los que he podido ver trabajos suyos de años atrás que ninguno de nosotros pagaría un euro por dichos trabajos. La prueba evidente es que nosotros mismos, los que estamos en este mundillo desde hace años y que modestamente creemos hacer las cosas bien, seguimos evolucionando y mejorando día a día: todos los días aprendes algo, bien referente al material o bien a la técnica.

Incluso quiero pensar que a los grandes maestros de este arte les pasa lo mismo. Creo que de ahí parte la pasión que sentimos por este arte, de ahí el tesón que ponemos, las horas que trabajamos e invertimos para ser cada día mejores. Ese afán de superación es lo que hace que este oficio sea tan apasionado; todos hemos tenido alguna vez un maestro, profesor, jefe, etc. etc. del que hemos aprendido y nos hemos sentido orgullosos de él e incluso hemos admirado…

¿Por qué esa sensación que a nosotros nos ha parecido tan bonita y gratificante no se la transmitimos a ciertos chavales y chavalas que están intentando aprender este arte? Como en cualquier otro oficio, la persona interesada sólo tiene que demostrar interés, lo demás es simplemente cuestión de tiempo. Esto también ayudaría a demostrarle al mundo que somos un colectivo y que tenemos interés en que este arte sea reconocido y que hacemos lo posible para que las generaciones venideras superen lo ya realizado. Es una manera más de decir… no nos rendimos ante las adversidades del gremio y queremos que esto continúe y, además, que continúe bien.

Sí, ya sabemos que suena bien eso de decir… a mi no me enseñó nadie y salí para adelante, el que venga detrás que se busque la vida. Pero hay que pensar también en esas personas que llevan un tatuaje y sabemos que realmente aquello no se hizo bien precisamente porque nadie nos enseñó. Creo que hay que evitar, en la medida de lo posible, que nadie hable mal de un tatuaje. Tarea difícil, lo sé, pero… ¿alguien dijo que esto era fácil?

Por otro lado, tenemos una gran cantidad de chicos y chicas que quieren hacer esto y, en este caso, tenemos que diferenciar entre los que realmente tienen ciertas cualidades y a los que hay que enseñar desde cero. Y también hay que saber decir… esto no es lo tuyo. Esto ahorraría a mucha gente que se introdujera en el arte del tatuaje y, por tanto, que se hicieran muchos trabajos chapuceros. Creo que aquí es donde entra el maestro y lo que quiera involucrarse: si prefiere un alumno aventajado y rápido o prefiere sacrificarse e intentar sacar para adelante a alguien que demuestre su amor y sacrificio por este oficio. En cualquier caso habría que valorar el esfuerzo del aprendiz, hay que dejar muy claro que para llegar hay que esforzarse muuucho más incluso de lo que te exija tu propio maestro.

Desde silver needle, damos cabida a todo tipo de artistas, o bien en el apartado de diseño o bien en la fabricación de máquinas o, en mi caso en particular, teniendo a una alumna para que aprenda a tatuar. Sólo puedo deciros que, tanto a nivel personal como profesional, este tipo de relaciones también le hacen a uno crecer.

Espero desde aquí haceros ver también que hay muchas más cosas de nuestro entorno que pueden ser tan gratificantes como tatuar y por eso os dejo esa pregunta… ¿los profesionales deberíamos enseñar?

Por último, quiero desde aquí darle las gracias a la revista por dejar que exprese mi opinión, a todos mis compañeros por la paciencia que tienen conmigo y, en especial, a mis dos chicas: mi alumna y mi mujer que se merecen todos mis esfuerzos.

Un saludo,

Esteban Arias

silver needle tattoo


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