La odisea de montar un estudio de tatuajes
diciembre 17, 2014 3 Por Cool Tattoo SLMontar un estudio de tatuajes… ¡Una odisea!
A continuación, te mostramos un artículo cortesía de Poker Tattoo, Estudio de Tatuajes en Sant Adrià del Besós (Barcelona), cuando empezaron sus andaduras…
En este escueto artículo queremos contaros la odisea que ha supuesto para Ismael y para mí el montar nuestro propio estudio de tatuaje y piercing.
Los primeros pasos
Por lo general, podemos pensar que abrir un negocio puede ser una tarea más que fácil ya que cada dos por tres vemos en nuestro barrio un nuevo súper o establecimiento de comida, también llamados restaurantes, así como locutorios, etc…
Cuando decidimos emprender este viaje psicotrópico hacia la propiedad de un local, ya que nos cambiamos de una ubicación para dejar lastres atrás y mejorar nuestra situación, tanto laboral, como personal, le dije a mi marido: “Esto no puede ser difícil, en un plis lo tendremos montado, unos permisos, unas obras y pim-pam, hecho”… pobre ilusa… ahí comenzaba nuestra andanza.
Ante todo hay que buscar el lugar donde emprender la actividad comercial, ¿será buena esta zona?, ¿lo será aquella?, ¿la gente relacionará que somos la misma gente de donde estamos ahora? Ya comenzaban las preguntas y las dudas, que ahora que ya tenemos el comercio abierto, os juro que no cesan.
He de confesar que tuvimos una gran suerte porque encontramos un local que nos pareció genial, en muy poco tiempo. Nos lo enseñó el caballero de la inmobiliaria, un tipo muy majo, que tenía muchas ganas de que nos hiciéramos con el arrendamiento del lugar, la crisis suponemos. Ya nadie alquila, ni nadie compra, el tema está muy mal, nos comentaba mientras nos mostraba las instalaciones. Dimos el sí, nos encantó, para qué mentir.
Vamos a por la segunda planta…
Siguiente paso, permisos en el ayuntamiento. Lo mejor es cuando llegas al piso de Urbanismo y comentas con la eficiente funcionaria que quieres abrir un local de tattoo en tal calle… ¿perdona?, pero creo que esa calle no pertenece a este municipio… ejem… vamos a pedir los planos y así nos aseguramos, pues subid a la quinta y lo pedís allí. Ok, finalmente la calle pertenece al municipio en cuestión, y ¿ahora qué?, pues bien, unos permisos de obra por aquí, con un proyecto por parte de un arquitecto… ¿un proyecto de un arquitecto para enracholar, pintar y poner pladur?, pues sí y sobre todo nos pagas el cuatro por ciento del presupuesto que te dé el profesional, la cosa se complica.
Y seguimos…
Continúa la aventura, vamos a la tercera planta: Medioambiente, mira es que vamos a abrir un estudio de tattoo y queremos saber qué nos hace falta… pues estáis regulados dentro del Convenio de Estética… poker face… menos mal que la UNTAP está poniéndose y poniéndonos las pilas con esto, porque tattoo y piercing en estética… en fin. Un permiso de gestión de residuos por aquí, unas tasas de sanidad por allá y listo, ya te irá el señor de sanidad, cuando crea oportuno a darte el visto bueno y cuando nos vaya bien te mandaremos el número de autorización sanitaria, si eso.
Pues más permisos, el de apertura, que va por metros cuadrados, una estocada de katana en plena espalda en plan ninja, y con esto ya puedes abrir… pero no antes de que te den el permiso de obras, que para pasar de la cuarta planta a la primera y de la primera a la cuarta, no van cuatro pisos, sino dos meses… eso sí, cuando ya estamos desesperados, porque de algo hay que comer, nos dice un chico del ayuntamiento, que este sí es eficaz, que la normativa ha cambiado y que en el momento que presentas la solicitud de obra, no tienes por qué esperar el visto bueno, así que manos a la obra, valga la redundancia.
Momento de pinta y colorea…
Y nada, esto son dos días, unas pinturitas, unos cuadros, y todo listo. Dos días, que en tiempo de La Sala del Espíritu del Tiempo de Son-Goku viene a ser un mes en el mundo real, las facturas se acumulan, alquiler, luz, agua, teléfono, gastos del piso porque increíblemente vivimos juntos en un piso con hipoteca y los famosos autónomos, porque el país tiene que cobrar, que sino España se va al garete. Y mientras tanto mi marido arañando los cristales porque no está pinchando ni una triste enredadera, malditas tiempo atrás y benditas en estos tiempos, y ¿no le puedes añadir un nombrecito o unas estrellas ya que estás? Tó guapas, eso sí.
Pues la estructura ya está montada, habrá que amueblar. Y ya nos ves a los tres que somos en el estudio dando vueltas por Ikea como cabras sin pastor y de aquí a Leroy Merlin y de allá al Carrefour… hemos visto más tiendas que la Personal Shopper de Paris Hilton y menos mal que toda la maquinaria, tintas, agujas, etc ya lo teníamos del anterior sitio donde estábamos. Pero de repente llega a nuestros oídos que, de un día para otro, ha vuelto a cambiar la normativa sanitaria… ¡esto no acabará nunca!… queremos que esto termine, la bomba H, una apocalipsis zombie, unas vacaciones en la Polinesia, ¡dios, ahí no que también tatúan y nos piden un permiso!
Momentos de locura
Mientras todos enloquecíamos, intentábamos mantener el contacto con nuestros antiguos clientes y captar a nuevos, informar a todo el mundo de que nos cambiábamos de local, de calle, de municipio… publicidad, esa es la solución, tiremos de Facebook, de Myspace, de la web y así encontramos a nuestros nuevos amigos de tatuadores.es que nos han ayudado en este trance que no ha hecho otra cosa que hacernos más sabios, más fuertes y adorar a todos los que nos piden una mariposa, un nombre o una estrella, porque ellos son nuestros clientes y los que nos arropan con sus manos para no dejarnos caer, lo que les comentan a sus amigos, que en tal sitio me han hecho esto que es mazo guapo y me han tratado de puta madre.
Estos somos nosotros y esperamos seguir al pie del cañón durante muchos años, disfrutando de nuestra nueva vida sin nadie que nos mire por encima del hombro, porque en esta profesión, necesitamos el apoyo unos de otros. ¡Gracias por leernos!
Cristina – Poker Tattoo
St. Adrià del Besós
Más información
¿Quieres más información y consejos para montar un estudio de tatuajes? Te recomendamos un interesante artículo al respecto.
3 comentarios
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.
Pues sí, una auténtica odisea. Y no solamente vosotros, que en todo intento para montarse un negocio propio, hay que sufrir la ineptitud y mala baba de las «administraciones públicas», más preocupadas de trincar y seguir parasitando a la sociedad, que de servir y hacer más fáciles los trámites a los ciudadanos.
Me a encantado sinceramente como lo has redactado, por que aunque nadie lo crea…. asi es .
Os deseo lo mejor.
Muy interesante! 😀